Vida plena en Dios

Vivimos en una sociedad de mucho descontento social en todas sus dimensiones porque hay tanta indiferencia y aparentemente mucha competencia por el desarrollo económico, el reconocimiento y el poder.

Donde el ser humano cada día enfrenta diferentes situaciones y se encuentra con obstáculos que parecieran ser invencibles. En el salmos 37 encontramos la manera correcta de superar aquellos obstáculos fortaleciendo nuestra relación con Dios y alineando nuestro estilo de vida conforme a los principios de la palabra de Dios.

1.- No te impacientes y cuídate de la envidia.

“No te impacientes a causa de los malignos, Ni tengas envidia de los que hacen iniquidad. Porque como hierba serán pronto cortados, Y como la hierba verde se secarán”. Salmos 37:1-2

A lo mejor te esfuerzas por salir adelante y haz intentado en muchas oportunidades pero no tienes resultados favorables como debería ser, sin embargo cuando ves a tu alrededor hay personas que  han avanzado con mayor facilidad y todavía haciendo maldades a su prójimo y eso genera un conflicto emocional en tu vida y aún está afectando tu fe en Dios.

Quiero decirte no te desesperes (Mateo 6:25-34), pon tu confianza en Dios; tampoco des lugar a la envidia (Salmos 73:3-16) porque pareciera injusto que otros progresan aun haciendo daño a su prójimo o participando en alguna corrupción, tranquilo si quieres tener un crecimiento sostenible y permanente, tienes que hacerlo a la manera de Dios y no a tu manera. Porque todo crecimiento superficial un día se caerá.

2.- Pon tu confianza en Dios y haz el bien.

“Confía en Jehová, y haz el bien; Y habitarás en la tierra, y te apacentarás de la verdad”. Salmos 37:3

En todo momento confía en Dios, porque él conoce tu necesidad y está dispuesto en atenderte, pero necesitas creer en sus promesas. Como creyente e imitador de Cristo cada día debes procurar hacer lo correcto, trabaja con justicia, con honestidad y humildad.

Pues Dios jamás decepciona y nadie sale frustrado de su presencia, de lo contrario disfrutamos de la vida en abundancia que no necesariamente está ligado a lo económico sino al desarrollo integral de la persona, saber quién soy, para que estoy aquí en la tierra; entonces cumpliremos el propósito de Dios como embajadores de su Reino.

3.- Deléitate en Jehová

“Deléitate asimismo en Jehová, Y él te concederá las peticiones de tu corazón”. Salmos 37:4

Saber que Dios está con nosotros es algo asombroso y aún más estar seguro que responderá en su momento las peticiones de nuestro corazón es una gran bendición, entonces deleitarse en Jehová significa regocijarse al saber que Dios nos ama y valorar su palabra porque ella determina nuestra existencia.

4.- Descansa y espera en Jehová

“Encomienda a Jehová tu camino, Y confía en él; y él hará,… Guarda silencio ante Jehová, y espera en él…”. Salmos 37:5,7a

Descansar en Jehová implica una dependencia absoluta, dejar todo en las manos de Dios y vivir bajo sus promesas (Mateo 11:28-30). Estimado amigo considera a Dios en tus decisiones, los creyentes no nos conducimos por nosotros mismos, buscamos la guía del Espíritu Santo orando en todo tiempo y escudriñando su palabra irrefutable. Que gratificante es saber que todo aquel que confía en Dios disfruta también de sus bendiciones.

Conclusión

Si queremos tener una vida plena en Dios es importante no olvidarse de estos 4 principios valiosos.

Tener una vida plena es experimentar la plenitud de caminar con Dios y saber el propósito de nuestra existencia.

Dios te bendiga y tengas un hermoso día, alégrate porque tu redentor vive.

• Escrito por: Samuel Molina Javier (Pastor de la Iglesia Misión Bíblica de Santidad)